Pep Otero | Buscar problemas a las soluciones

Pep Otero | Buscar problemas a las soluciones

Cuando veo la actuación del que durante casi año y medio ha sido el equipo de gobierno de la ciudad tengo la sensación de que durante este tiempo los tres socios han ido cada cual por su lado, sin una estrategia común y, sobre todo, buscando problemas en las soluciones (y no al contrario) en temas claves para nuestro Alicante.

Problema es que una multinacional como IKEA no quiera instalarse en tu ciudad. Nosotros no teníamos este problema porque si querían y lo hemos generado no ofreciendo soluciones y alternativas viables (siempre haciéndonos valer, sin vasallaje) y ahora están buscando alternativas en Alicante y con mucha razón. Problema es que los cruceros no paran en nuestra ciudad. Los cruceros paraban y los turistas invadían nuestra ciudad y otras cercanas a las que se organizaban excursiones. Argumentan falta de atractivo, y yo creo que ha sido más falta de promoción de nuestros activos turísticos y, por supuesto, activos comerciales puesto que no se ha permitido abrir tiendas en domingos ni siquiera cuando llegaban cruceros con miles de pasajeros.

Problema es no tener puerto que genere actividad económica. Tenemos puerto pero parece más un problema que una aportación en la ciudad. El objetivo tiene que ser el incremento de la actividad portuaria, con descargas de graneles incluídos, y la convivencia con los vecinos.

Se tiene que llegar a un consenso para que se consiga esta convivencia y aumente la actividad en el puerto, se tendrán que hacer inversiones, seguro, la alternativa pero es que se traen los graneles al puerto de otra ciudad y entonces nos lamentaremos. El puerto es un gran valor añadido para una ciudad y tenemos que explotar todo su potencial.

Después de años de corrupción del Partido Popular de Alicante certificada por los juzgados todos los alicantinos nos merecíamos un Ayuntamiento activo, ambicioso con los objetivos de los alicantinos pero nos me encontrado con un equipo de gobierno, ahora deshecho, que se ha demostrado torpe e incapaz. El espíritu de Demòcrates Valencians es el de aportar soluciones a las iniciativas positivas para nuestra sociedad y ambicioso en en cuanto a la mejora de calidad de vida de los alicantinos.

Tenemos una ciudad con potencial de primera fila, sólo hay que pulir algunas cosas y hacer políticas para favorecer la actividad productiva y la generación de puestos de trabajo.